EL CINE
jueves, 21 de octubre de 2010
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“Una intento de película de horror completamente olvidable”. David Nusair, Rotten Tomatoes
“The Hauting of Molly Hartley” es una película entretenida, una visión distinta dl cine demoniaco que prometía bastante, pero que lo único que hace durante hora y media es vender humo y que contiene un final que resulta ser una chuminada pubescente. Todo un desperdicio.” – Hathor, www.nidodecuervos.com
“La producción es pésima y los pocos efectos son chafas, se basan de elementos tan básicos como el ruido para hacer que el publico brinque y casi no lo logran, en general es una cinta totalmente olvidable…” – Elliot Braarascout, cineopsis.com
Sitio Oficial: http://www.thehauntingofmollyhartley.com/
¿Cuántas veces ha pasado que películas de horror basadas en el Anticristo se les cambie el título en español y adopten el de “La Profecia” con todos sus derivados y adiciones posibles?. Esta película del año 2008 que se acaba de estrenar en la cartelera colombiana no es la excepción. Se trata de The Haunting Of Molly Hartley (algo así como El Fantasma o mejor aún La Posesión de Molly Hartley), ópera prima de Mickey Liddell quien es conocido en los países del norte por haber co-producido la serie de televisión “Everwood”.
Dirigida clarísimamente para un público juvenil, esta cinta nos cuenta la historia de Molly Hartley, una adolescente a la que le faltan pocos días para alcanzar los 18 años de edad y que han sido antecedidos por una serie de dolorosas experiencias al intentar ser apuñaleada por su madre, que ahora se encuentra en un hospital psiquiátrico, enfrentarse a un cambio de residencia y un nuevo colegio.
La película avanza con toda clase de trucos para hacer sobresaltar al espectador incluído aquellos que no van al caso como el gran suspenso que puede generar los ruídos en una puerta, a la que se le va abriendo misteriosamente la ventana de la correspondencia por la que más adelante se ve caer el “temible” periódico.
Este tipo de recursos demuestran la pobreza de un guión que más que presentar los misterios y sembrar la paranoia por lo que parece ser la inminente llegada del Anticristo, funciona mejor (por decir algo positivo), como una especie de drama de una adolescente que vive su tragedia por una situación insólita.
Vuelvo al comienzo de esta escrito, la película de culto “La Profecía” del año 1976 y del director Richard Donner solo ha servido para generar mediocres remakes como el caso reciente de “La Profecía del No Nacido”, o para que su título sea utlizado para atrapar incautos.
Ficha Técnica
Director: Mickey Liddell
Género: Horror
Guión: John Travis, Rebecca Sonnenshine
Duración: 1Hr 32Mins
Reparto: Haleny Bennett, Jake Weber, Chace Crawford, Jessica Lowndes, annaLynne McCord
Música: James T. Sale
Fotografía: Sharone Meir
País: Estados Unidos
Año: 2008
Director: Mickey Liddell
Género: Horror
Guión: John Travis, Rebecca Sonnenshine
Duración: 1Hr 32Mins
Reparto: Haleny Bennett, Jake Weber, Chace Crawford, Jessica Lowndes, annaLynne McCord
Música: James T. Sale
Fotografía: Sharone Meir
País: Estados Unidos
Año: 2008
Trailer
La Profecía del Diablo
Siempre digo que no soy un amante del cine Europeo, pero sí lo soy de las películas bizarras e inteligentes, por lo que “A town called panic” (Panique Au Village) cumple indefectiblemente con esa premisa y fue una película que me sorprendió y me divirtió un montón.
La película está hecha con el método de stop motion, con unos muñecos comunes y corrientes como un cowboy, un indio, un caballo, un policía, un granjero, animales de granja y algunos mas. Es un trabajo terriblemente difícil hacer algo así, y por más que las imágenes no digan nada, creo que terminan diciendo mucho y le dan un matiz mas que gracioso a todo.
La historia es sobre un indio, un cowboy y un caballo que viven bajo el mismo techo, y cuando llega el cumpleaños del caballo, el regalo que le hacen sus amigos termina haciendo desastres en su casa, y la de sus vecinos que son granjeros y policía.
El cowboy es realmente un boludo, no deja de hacer pavadas y cuando el caballo le pone los puntos a el y a su amigo el indio, terminan siempre haciendo las cosas mal. Posteriormente entran en la película unos bichos que viven debajo del mar, y la película entra en un nivel de locura terrible que ya directamente al final termina un poco cansando, pero creo que la esencia es lo mas importante y la termino poniendo con un 7.5 bro. por su originalidad, inteligencia y lo bizarra que es.
Si te gusta ese tipo de cine, te la recomiendo. Les dejo unas imágenes, tralier y posters para que entiendan lo que les quiero explicar:
La película está hecha con el método de stop motion, con unos muñecos comunes y corrientes como un cowboy, un indio, un caballo, un policía, un granjero, animales de granja y algunos mas. Es un trabajo terriblemente difícil hacer algo así, y por más que las imágenes no digan nada, creo que terminan diciendo mucho y le dan un matiz mas que gracioso a todo.
La historia es sobre un indio, un cowboy y un caballo que viven bajo el mismo techo, y cuando llega el cumpleaños del caballo, el regalo que le hacen sus amigos termina haciendo desastres en su casa, y la de sus vecinos que son granjeros y policía.
El cowboy es realmente un boludo, no deja de hacer pavadas y cuando el caballo le pone los puntos a el y a su amigo el indio, terminan siempre haciendo las cosas mal. Posteriormente entran en la película unos bichos que viven debajo del mar, y la película entra en un nivel de locura terrible que ya directamente al final termina un poco cansando, pero creo que la esencia es lo mas importante y la termino poniendo con un 7.5 bro. por su originalidad, inteligencia y lo bizarra que es.
Si te gusta ese tipo de cine, te la recomiendo. Les dejo unas imágenes, tralier y posters para que entiendan lo que les quiero explicar:
Crítica de cine
Crítica de cine: Gestación es cine en una sola carta
Fácil. Estamos ante una película hecha para envolver al público de manera fácil, y lo logra
El estreno del filme costarricense Gestación (2009), dirigido por Esteban Ramírez, ha tenido muy buena reacción de parte del público y de los comunicadores sociales que asistieron al estreno privado de dicha cinta. Incluso, hasta el crítico de música, Alberto Zúñiga ( La Nación ), cierra su comentario sobre la música del filme con una alabanza general hacia la película toda.
Por su parte, el periodista Alexánder Sánchez ( La Nación ) señala que el filme es un gran respiro, deja un buen sabor de boca y hace soñar. Así es, ante el cine costarricense hay un cariño que nos convierte a todos en (generosos) críticos de cine. Pero no, amigos, Gestación no es la gran película que se pregona y, más bien, es un paso atrás del director Ramírez ante su anterior película: Caribe (2004).
Conocer el oficio. No me gusta hacer “cine comparado” en mis críticas, pero –no hay de otra– creo que Caribe es película más sólida en su dinamismo narrativo, en su realización y en su afán crítico para sacar una realidad de la invisibilidad a que ha sido sometida. Caribe es un juego de distintas historias dicho con rigor. De esto, se claudica en Gestación .
Algo sí está claro con Gestación , y es que Esteban Ramírez confía en sus habilidades para poner un relato en pantalla grande. De esto no hay duda. Que Ramírez conoce el oficio, lo conoce; que lleva ese oficio al arte, también es cierto.
Lo mejor de Gestación es la puesta en imágenes, incluyendo la exitosa dirección de actores, con un soberbio trabajo de la joven Adriana Álvarez.
Los problemas de Gestación arrancan desde la poquedad del guion, desde su superflua linealidad, texto más anunciado que el canto del gallo cuando Pedro negó a Jesús. Es relato sin puntos de giro, es redundante secuencia tras secuencia, como concierto de guitarra a una sola cuerda, para narrar lo que le pasa a una colegiala que, por travesear con el sexo, queda embarazada.
Es evidente que María Silva, como coguionista, no tiene la audacia ni la profundidad dramática que sí evidencia Ana Istarú, coguionista de Caribe .
Por eso el drama presente en Gestación resbala –poco a poco– hacia el melodrama más bien folletinesco, porque se convierte en fórmula (eso digo: ¡fórmula!) para evocar sentimientos fáciles en el espectador.
El gancho funciona. En esta nueva cinta de Ramírez no se siente la tragedia interior en los personajes, porque nunca son observados a fondo. Como gancho, se nos dice que el filme se basa en una historia verdadera, cuando hay miles de historias como esa, con una moraleja eclesiástica para los jóvenes, algo así: de que no hagan el amor porque vean lo que les puede pasar. ¡Eso en pleno siglo XXI!
Hay alguna denuncia social con rutas alternas: mostrar los tugurios y al fondo el hábitat de los ricos, por ejemplo. Igual con lo ecológico (las aletas de los tiburones). También con una visión parcial de la religión (las monjas del colegio). Todo igualmente tratado de manera superficial, como oír risitas de ratones.
Gestación es como ver un juego de naipes en una mesa donde todos los jugadores tienen los ases. Es película para ser fácilmente digerida, comida liviana, para que el público la elogie. En Caribe , Esteban Ramírez subió como palmera, pero en Gestación baja como un coco.
GESTACIÓN
Crítica: The Road (La carretera)

Título: The Road (La carretera)
Título original: The Road
Director: John Hillcoat
Género: drama
Duración: 109 minutos
Intérpretes: Viggo Mortensen, Kodi Smit-McPhee, Robert Duvall, Charlize Theron
La carretera, trailer en español
¿Debo ir a verla?



Desoladora, auténtica, intensa, bella y emotiva: una de las películas del año
The Road (La carretera) no es un film de acción, ni de aventuras, ni de terror, aunque tenga elementos de todo ello. Tampoco es un drama al uso: la relación padre-hijo que nos dibuja el film de John Hillcoat, basado en la novela de Cormac McCarthy, es tan apasionante, emotiva y auténtica que trasciende géneros y filosofías. Y es que, al igual que el mundo de los protagonistas, cuando todo se deshace sólo hay lugar para lo básico e importante.Título original: The Road
Director: John Hillcoat
Género: drama
Duración: 109 minutos
Intérpretes: Viggo Mortensen, Kodi Smit-McPhee, Robert Duvall, Charlize Theron
La carretera, trailer en español
¿Debo ir a verla?




Desoladora, auténtica, intensa, bella y emotiva: una de las películas del añoPorque el film posee elementos de cada género mencionado más arriba, que cuando aparecen, lo hacen con intensidad. The Road (La carretera) es un drama que, por un lado, posee una dimensión épica tanto en lo visual –aunque no presuma de ello- como, sobre todo, en lo íntimo, que ocupa la mayoría de su metraje. La relación entre padre e hijo que vertebra la película lo hace de manera tan clara, que ésta no necesita de un hilo conductor o una trama fuerte más allá de ella: las diferentes escenas, que oscilan entre lo anecdótico y lo terrorífico, parecen realmente insertas en un conjunto con una finalidad expresiva clara, más allá de que huya o no de los estereotipos del cine de aventuras apocalípticas, o del puro y duro terror, dependiendo de cada una de ellas. Es la prueba del triunfo de film de Hillcoat, que supera así el primer escollo de cara a adaptar de forma positiva la novela de McCarthy.
The Road (La carretera) es, además, un film muy bien ajustado en cuanto a duración y estilo. La fotografía del español Aguirresarobe es destacable, y no porque toque mencionarlo. Pero quien se lleva la palma es Viggo Mortensen, que entrega una interpretación sosegada y trágica, absolutamente capaz de colmar todas las expectativas. Su química con el niño Kodi Smit-McPhee, su hijo en la ficción, es sólida y hace creíble un film que podía haber sido prolijo, frío o demasiado falso.
Así pues, The Road (La carretera) es un film turbio y desesperanzado hasta la extenuación, pero tiene la mágica ambigüedad de que será recordado, precisamente (y estoy seguro de que va a ser recordado, a diferencia de Precious o incluso la entretenidísima Avatar) por iluminar los mejores recovecos del alma humana. Hillcoat se beneficia de las numerosísimas ambigüedades del argumento pergreñado por McCarthy y se dedica a dar entidad y vida a los dos personajes principales, a cultivar la relación maestro-pupilo entre ambos e invertirla con elegancia en su último tercio
Con unos quince minutos finales simplemente magníficos, el film de John Hillcoat se sitúa como lo mejor del año, tanto del pasado como del presente, que apenas ha comenzado. Un drama sencillo y épico de enorme calado sensorial y sentimental, un relato que navega entre la memoria de lo que nunca más será y el futuro más desesperanzado, y capaz de extraer, sin embargo, lo más positivo de ambos. Casi un prodigio.
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